Una de mis pasiones es el mundo del ferrocarril. Intento evocar e investigar su pasado y cuando puedo disfruto de su presente. Mi madre es natural de Peñarroya y los veranos de mi infancia transcurrieron por sus calles y campos, a la sombra de las ruinas de la Sociedad Minero Metalúrgica de Peñarroya y cautivado por su mitología.

domingo, 4 de febrero de 2018

Aquel Porvenir

Nuevamente los amigos de la página de Facebook Peñarroya-Pueblonuevo del Terrible me han motivado a realizar otra entrada en el blog. Están llevando a cabo una valiosa recopilación de fotografías históricas del Valle del Guadiato y sus gentes. Y entre tantas imágenes que plasman la vida cotidiana de aquellos protagonistas, en algunas aparece el ferrocarril.

Dentro de una serie dedicada a fotografías de los vecinos de la aldea minera El Porvenir de la Industria, hubicada en el término municipal de Fuente Obejuna, apareció la siguiente estampa.




Los niños aparecen montados en una pequeña locomotora de vapor. Por las dimensiones y al tratarse del entorno del Porvenir de la Industria, apuesto que se trata de una de las 3 pequeñas locomotoras de vapor que dieron servicio al modesto ferrocarril que unió la mina San Rafael con los pozos San Cecilio, Cervantes y San José.

En contra de lo que yo pensé durante años, el ferrocarril de ancho ibérico de La Maquinilla nunca llegó hasta las proximidades de la barriada El Porvenir de la Industria. Como explica el maestro José Antonio Torquemada en su libro sobre tal camino de hierro,  a finales de la década de los años 20 del pasado siglo la Sociedad Minera y Metalúrgica de Peñarroya (SMMP) decidió reactivar las explotaciones carboníferas más occidentales que había adquirido al Banco de Castilla en 1903. Con tal fin tendió una vía estrecha con separación de 60 cm entre las caras internas de los raíles, ancho de vía muy común en explotaciones mineras. Ya en 1894 fue tendido un ferrocarril de este tipo en El Porvenir con una longitud de 3,5 kilómetros para unir las primeras minas de antracita con el lavadero situado en el kilómetro 52 de la línea Belmez-Almorchón de MZA. La vía junto con el material móvil costó 120.000 pesetas. Fueron adquiridas 20 vagonetas con capacidad para un cuarto de tonelada de mineral y dos locomotoras de cinco toneladas fabricadas en Bélgica por la firma Couillet.



Locomotora semejante a las descritas fabricada en 1886 perteneciente al Ferroclub Linch. 

Cuando la SMMP adquirió las citadas propiedades del Banco de Castilla en 1903, decidió abandonar la explotación de las minas cercanas a la barriada de El Porvenir. Desmanteló el ferrocarril existente y trasladó las dos locomotoras hasta Espiel, en 1913, para dar servicio al transporte de carbón entre la mina La Luz y la estación de Ferrocarriles Andaluces. Dicha mina fue cerrada definitivamente en 1921 y a finales de dicha década las dos máquinas regresaron a El Porvenir como se ha comentado anteriormente.

Estimo que este ferrocarril estuvo en funcionamiento hasta finales de la década de los años 60. No llegó a transportar viajeros, limitándose al acarreo de mineral hasta San Rafael. Las explotaciones mineras de El Porvenir ya pertenecían a la Empresa Nacional de Carbones del Sur Sociedad Anónima (ENCASUR), entidad nacida en 1961 con la participación del Instituto Nacional de Industria y la SMMP. Según Torquemada fue el último ferrocarril con este ancho de vía que funcionó en el exterior de las minas del Valle del Guadiato.  


Vista desde avión de la zona de El Porvenir 1956-1957 (geomap.com). 

Detalle de El Porvenir 1956-1957. En línea roja se indica el trazado del ferrocarril de ancho 60 cm. (geomap.com). 


El 12 de enero de 2012, Torquemada publicó una entrada en el blog de La Maquinilla en la que repasaba la historia de El Porvenir con motivo de su centenario. Conocido en la zona como "La Raña" este sencillo núcleo urbano experimentó en 1912 su mayor crecimiento gracias a la construcción de 90 viviendas para obreros y una escuela, por parte de la SMMP. Al final del artículo el autor reflexiona sobre la importancia del ferrocarril de La Maquinilla no solo por la cuestión logística sino también por facilitar la creación de este tipo de asentamientos. Doy fe de ello ya que la historia de La Raña es la historia de mi familia. Aunque una vez casados mis abuelos residieron en Peñarroya, a mi abuelo Antonio se le conoció como "El Raña". Siempre trabajó en las minas de El Porvenir y para ello usaba La Maquinilla como medio de transporte. Torquemada termina su texto aludiendo a F.J. Aute que trata de explicar tal nombre en su trabajo "La Mina como Génesis":

“Tras las primeras explotaciones (…) se suceden una serie de años en que las antracitas parecen despertar poco interés, hasta que el Banco de Castilla interviene en el negocio minero y concretamente en La Parrilla y otra zona próxima conocida como La Raña. Es el Banco de Castilla quien levanta las primeras edificaciones que luego darían origen a los poblados mineros de La Parrilla y el Porvenir de la Industria. El arrogante nombre, que ahora nos parece una triste ironía, de El Porvenir de la Industria, no es más que un reflejo del ilustrado espíritu decimonónico y de su fe en la industria, el capital y el esfuerzo del hombre propios de la época”.


(geomap.com) 

Descripción de la zona en un documento fechado en 1953

El área según el actual mapa topográfico. (geomap.com)

Uno de mis pecaminosos vicios es el de soñar. Me imagino que hubiese sucedido si ferrocarriles como el descrito se hubiesen respetado a pesar del cierre de minas e industrias. Y que con los años pudiesen haber permitido su reutilización para fines turísticos y culturales. Hay muchos ejemplos por el mundo y afortunadamente también en España. Ejemplos son el Parque Temático de la Minería y el Ferrocarril de Utrillas, el Tren de Arganda o el Ecomuseo Minero Valle de Samuño, entre otros.





Pero voy más allá. Como en Utrillas, hay ejemplos de vías férreas que han vuelto a ser tendidas a pesar de su desaparición durante años. Todo proyecto cuesta dinero y esfuerzo. Pero pensemos en la recompensa y la reactivación económica de antiguas zonas mineras. Muy cerca de La Raña está la mina San José que goza de un buen estado de conservación y se me antoja como pieza clave para un parque temático de la minería.




3 comentarios:

  1. Lo dicho, muy buena entrada y nuestro absoluto respaldo a lo aquí expuesto y nuestra colaboración para cualquier iniciativa que contribuya a hacer realidad ese retorno del material de Peñarroya - Pueblo Nuevo

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